1. Cultivo de lirios

Reproducción

Existen dos formas completamente diferentes de reproducir iris según el objetivo deseado:
Intente obtener lirios idénticos a la planta madre.
La forma más sencilla y que no requiere ninguna intervención humana ya que sobre el rizoma que tengamos y que haya florecido (así estamos seguros de la conformidad de la variedad) se desarrollarán brotes laterales. Estos brotes serán adultos en un año y luego podrán separarse de la planta madre y replantarse. Es la reproducción asexual la que permite obtener clones perfectos.

Reproduction Iris
multiplicación del rizoma

Este rizoma, que floreció el verano pasado y que ya no florecerá, ha desarrollado nuevos lirios idénticos a él. En este caso, son 14 (pueden ser más, pero muchas veces menos…).
Buscar obtener nuevos cultivares.
Esta es la procreación “asistida”.
Los nuevos lirios son fruto de programas de creación por hibridación y requieren de una intervención externa: o una hibridación anárquica y descontrolada, que es la que deja espacio a los insectos polinizadores, o una hibridación humana y programada (la que nos interesa).
El hibridador utiliza unas pinzas o un cepillo pequeño y toma el polen de la antera del padre y luego lo coloca en el labio del estigma de la madre. Coloca una etiqueta debajo de la flor madre mencionando el título del cruce (madre X padre) para su posterior trazabilidad. Si el cruce tiene éxito, el ovario comenzará a hincharse una semana después y luego se transformará en una vaina. Este, dos meses después, se volverá marrón y se partirá para dejar salir las semillas que nuestro hibridador se habrá encargado de recuperar ante los primeros signos de agrietamiento de la vaina.
Las semillas se sembrarán en otoño en recipientes adecuados. La primavera siguiente crecerán lirios jóvenes. Se replantarán en el suelo en verano. Entonces será necesario esperar dos o incluso tres años antes de que florezcan y varios años antes de decidir si son dignos de registro o no.

Plantando

El suelo.

Iris requiere suelos bien drenados, preferiblemente en montículos, si el suelo es pesado conviene incorporar humus para aligerarlo, o incluso cal.

Plantation iris
drenaje alrededor del iris

En caso de fuertes lluvias, los montículos permiten que las raíces del iris estén fuera del agua.

Donde ? Cómo ? Cuando ?


Elija un lugar que esté bien expuesto al sol, al menos durante la mitad del día. A la sombra, el iris florecerá poco o nada.
Los lirios se replantarán con la parte superior de los rizomas expuesta y las raíces bien enterradas. Empaque y riegue abundantemente al momento de la siembra y luego cada semana hasta la recuperación, aproximadamente de un mes a 6 semanas después.
Dependiendo de la categoría, los iris estarán separados entre 25 y 40 cm. Plantarlos demasiado cerca significa dividirlos con más frecuencia de lo normal.
Julio, agosto y septiembre son generalmente los meses elegidos para replantar lirios con tolerancia retardada a las regiones de clima cálido, lo principal es que estén bien establecidos antes del clima frío. Si no puedes plantar tus lirios al recibirlos (¡lo ideal por supuesto!), o los colocas en arena, o los pones en un lugar seco y ventilado, pero sobre todo no los coloques en agua para hidratarlos: pueden quedarse se secan durante meses sin problema, mientras que el agua hará que se pudran rápidamente.

Riego

Los lirios necesitan humedad para recuperarse. Sin embargo, como ocurre con la mayoría de las plantas, un riego copioso, profundo y espaciado será mucho más beneficioso que un riego escaso y repetitivo que corre el riesgo de favorecer la pudrición de los rizomas.

En caso de sequía prolongada en verano se recomienda riego abundante una vez al mes.

Fertilización


Es aconsejable aplicar un abono completo con un bajo título de nitrógeno, tipo 6-10-10, porque el exceso de nitrógeno favorecerá un fuerte desarrollo del follaje en detrimento de la floración. El cuerno asado, la harina de huesos y los superfosfatos también son eficaces.
Son suficientes dos aplicaciones anuales: la primera al inicio de la primavera y la segunda un mes después de la floración.

Mantenimiento

Malezas, escombros, hojas muertas… tantos enemigos de la buena salud de los lirios contra los que hay que luchar. Tendrás que elegir entre desherbado manual o químico, todo dependerá también de la superficie que dediques a tus lirios y del tiempo del que dispongas.
No permita que se acumulen residuos en la base de los iris. Los rizomas ya no estarán expuestos al sol y sufrirán.
Romper los tallos florales poco después de la floración: esto supone un gasto innecesario de energía para la planta y además evitará conservar las vainas resultantes de hibridaciones inoportunas. Corta el follaje dorado, manchado o dañado.

Para evitar manchas en el follaje (heterosporiosis), aplicar un fungicida desde mediados de marzo cada 3 semanas hasta finales de mayo. Estas manchas son antiestéticas, pero no comprometen la salud del iris.
Para evitar la pudrición del rizoma, evita riegos inoportunos, plantaciones demasiado profundas, suelos encharcados y sin drenaje y suelos invadidos por cualquier cosa que les impida disfrutar del sol. Si un lirio está afectado, sácalo, corta generosamente la parte podrida para llegar a la parte sana, espolvoréalo con canela y déjalo secar varios días a pleno sol antes de volver a plantarlo en una maceta en una mezcla muy arenosa donde poder monitorearlo.
Luchar contra los insectos del suelo con un tratamiento adecuado: los gusanos de alambre gustan de nuestros iris, a los que no les gustan nada y pueden ser destruidos por estos parásitos.

 

División

Tus plantas de iris se han vuelto enormes, los rizomas se superponen… ¡No esperes a que dejen de florecer! Divídalos cada 3 a 5 años, en verano, arrancando todo el macizo y conservando sólo los rizomas más grandes que se encuentran alrededor del borde del macizo. Pode el follaje y vuelva a plantarlo inmediatamente, siguiendo los consejos de plantación y riego.

En definitiva, cuida tus lirios que no son muy exigentes y te lo devolverán cien veces iluminando tu jardín y perfumando sutilmente tus tardes.

Un poco de morfología…

detalle de un iris barbudo
detalle de un iris barbudo

2. Clasificación del iris barbudo

Dependiendo de la distribución de colores en la flor del iris, estos se clasificarán en diferentes categorías. Le llevaré a un recorrido ilustrado por estas diferentes clasificaciones que le permitirá comprender mejor estas designaciones..

3. Iris PBF

Los llamados lirios PBF tienen un follaje de color púrpura violáceo en la base (Purple Based Foliage).

Iris PBF
Iris PBF

Estos lirios representan el 7% de mi colección. Además del aspecto estético, que no es despreciable, también suponen una valiosa ayuda a la hora de identificar determinados iris.
Tomemos el caso, por ejemplo, de ‘Codicil’:



Codicil
Iris - Codicil

y ‘Sacrée Barbouze’ :

Iris - Sacrée Barbouze

Puede resultar complicado identificar un iris y decir si es de una variedad u otra. Pero tenemos una gran ventaja, ya que «Codicil» es un PBF y «Sacrée Barbouze» no lo es. Así, este follaje diferente puede evitar un error de identificación.

4. Los ganadores

En Estados Unidos es tradición otorgar medallas a los lirios en cada categoría. Esta carrera por los honores se lleva a cabo durante varios años y los jueces de la American Iris Society otorgan premios y medallas.

La distinción más alta es la Medalla Dykes, que se otorga a un solo iris por año. Sólo los lirios que ya hayan superado otros concursos pueden calificar para este concurso. Es lamentable que sólo los lirios americanos puedan participar en este concurso… ¡por ahora!

Aquí hay una publicación del AIS:

The American Dykes Memorial Medal.